Alejandro Peza
La delegación en Quintana Roo de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Quintana Roo reporto el cierre de más de dos mil restaurantes en once meses de pandemia, el dirigente de la Canirac en la Península de Yucatán, Gustavo Pech, preciso que sería “catastrófico” que el semáforo epidemiológico permanezca en naranja.
“En el caso de Quintana Roo, hubo un 20 por ciento afectados en relación a diez mil afiliados que tenemos en la delegación de todo el estado esto en once meses de pandemia, pero de continuar con el semáforo naranja la situación pudiera tornarse critica e insostenible”.
Gustavo Pech, precisó que hay negociaciones con la Secretaría de Finanzas y Planeación para que se extienda una hora más el cierre de los negocios.
El horario de operación de los restaurantes en semáforo naranja es hasta la media noche y con un aforo máximo permitido del 50 por ciento.
Un dato relevante es que Joaquín Noh Mayo, presidente de la Unión de Propietarios de Bares, Restaurantes y Similares en el municipio de Othón P. Blanco informó que algunos negocios que antes de la crisis sanitaria solamente se desempeñaban bajo el giro comercial de bares ahora lograron reabrir tras cambiarse al giro de restaurante-bar.
El dirigente empresarial confirmó que en el Boulevard Bahía de Chetumal y algunos puntos de la ciudad, 15 negocios que se desempeñaban como antros y bares, consiguieron reabrir pero ahora vendiendo bebidas exclusivamente acompañada de alimentos.
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