Alejandro Peza
Unos 350 trabajadores que laboran en el Hospital General de Chetumal exigen al Gobierno Federal les liquide el «estímulo» Covid-19 que consiste en el pago de un incentivo mensual de entre tres y cuatro mil pesos.
“A todos nos compete esto porque llevamos nueve meses en la pandemia, no nos negamos a trabajar con ocho o 12 horas atendiendo, pero en el Seguro Social mes con mes les dan el famoso bono COVID y nosotros que llevamos nueve meses aquí ni un distintivo nos han dado”, dijo Marcos Padilla, uno de los trabajadores en protesta.
El personal del Hospital General demostró con documentos que médicos y enfermeros del IMSS e ISSSTE de Chetumal reciben este incentivo económico desde hace varios meses atrás.
“Tenemos compañeros que se han contagiado de coronavirus y, es verdad se van 21 días a sus casas pero con el riesgo de volver a contagiarse, tenemos compañeros que están dados de alta por contrato y ninguna prestación reciben, ellos están más vulnerables”, añadió otro de los manifestantes.
Una de las trabajadoras aseguró que fue el mismo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador el que decretó que se realizarían los pagos.
“El mismo presidente de la República, manifestó que todos los trabajadores de la salud desde la intendencia, médicos, personal administrativos y enfermeros, ganarían un incentivo por arriesgar su integridad al atender a personas contagiadas por este virus, nosotros no nos hemos negado en ningún momento de atender con calidez y calidad a los enfermos que llegan, este recurso federal tiene que llevarse a cabo por medio del Gobierno Estatal al Gobierno Federal”, añadió.
Los trabajadores manifestaron que médicos y enfermeros que laboran en otras instituciones de salud cuentan con documentos donde ya se les cumplió con los pagos que llevan como título “Pago federal COVID”.
“El Hospital General de Chetumal fue considerado como un hospital de mediano riesgo, pues les argumentaron que se habilitaría el hospital oncológico para atender a enfermos de COVID-19, Sin embargo esto jamás pudo ser una realidad y el Hospital General atrajo todo el remanente de enfermos que no podían estar incluso en el ISSSTE o en el IMSS”, concluyeron los inconformes.
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