Alejandro Peza
Empresarios de la industria de la masa y la tortilla en la ciudad de Chetumal buscan frenar el alza al precio de la tortilla y optan por nixtamalizar el maíz para reducir los costos de producción.
En febrero del 2022, las harinas industrializadas para la elaboración de masa y tortilla sufrieron un ajuste a la alza de 800 pesos por tonelada, pasando de 12 mil 700 a 13 mil 500 pesos, hablando de la materia prima más económica, ya que en el caso de la harina premium esta rebasa los 15 mil pesos por tonelada.
Julio Durán Sánchez, presidente de la Industria de la Masa y la Tortilla en Quintana Roo, advirtió que se prevén más ajustes que apuntan a un incremento global de hasta tres mil pesos por tonelada de harina durante lo que resta de este año.
Ante esta situación, para no impactar en el bolsillo de los consumidores con otro incremento en el precio de la tortilla, como ya se ha dado en otras entidades del país, además de reducir los costos de producción, dijo los productores de este alimento básico están optando por nixtamalizar el maíz.
Aunque esto les genera mayor trabajo a quienes se dedican a esta actividad, por el delicado proceso de elaboración, refirió es la alternativa más viable para no castigar aún más sus utilidades, como lo han venido haciendo en favor de la clientela.
Durán Sánchez, estimó que con esta metodología alterna, los empresarios del ramo estarán reduciendo sus costos de producción por alrededor del 20 por ciento, con la expectativa de mayores ganancias, y sin la necesidad de castigar a los consumidores, manteniendo el precio por kilogramo de tortilla en un máximo de 23 pesos para la zona sur del estado.
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