Incrementa el arribo de sargazo a las costas del estado

Alejandro Peza

El Observatorio Ciudadano Sargazo reportó un incremento en el arribo del alga a las costas de Quintana Roo, en su más reciente monitoreo se informó que de 138 playas observadas en 56 hay un índice abundante de sargazo, 22 con un índice moderado y solo una playa con un índice excesivo.

La mayoría de las playas con una afectación abundante están en Punta Allen, Sian Kaan, Tulum, Akumal y Riviera Cancún.

Mientras que con una condición de arribo moderado están las playas de la Riviera Maya, Playa del Carmen, Puerto Morelos e Xcalak.

En tanto que con un arribó bajo de sargazo están las costas de Holbox, Costa Mujeres, Isla Mujeres, Cancún, Cozumel y Mahahual.

Y en condiciones libres de sargazo se encuentra Isla Contoy y Chetumal.

Un dato importante es que Especialistas de la Unidad Académica de Sistemas Arrecifales-Puerto Morelos, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICML) de la UNAM, publicaron un estudio en la revista indexada Elsevier. En este, se indica que en 2011 se reportaron los primeros arribos masivos de sargazo pelágico (el que flota libre en el mar) en países del Caribe oriental y la costa oeste de África. A mediados de 2014, el fenómeno se repitió en el resto del Caribe (México, Florida y Centroamérica, incluidos).

Desde entonces, se han registrado varamientos frecuentes e importantes, causando afectaciones ecológicas, económicas y de salud en más de 30 naciones. En las costas del Caribe mexicano, estas acumulaciones masivas anuales han ocurrido desde 2018, con una periodicidad y abundancia en aumento. Aunque inicialmente la temporada de sargazo duraba entre cinco y siete meses, en 2023 se espera que sean nueve, por lo menos.

En el estudio “Costo de limpieza del sargazo pelágico en México”, los universitarios analizaron datos sobre los gastos de limpieza en tres municipios de Quintana Roo (Puerto Morelos, Solidaridad y Tulum) y cinco hoteles entre Tulum y Cancún, lo que arrojó un aproximado de un millón y medio de dólares al año por cada kilómetro de litoral.