Dos fuertes accidentes fueron ocasionados por conductores ebrios

Alejandro Peza

Dos fuertes accidentes ocasionados por conductores ebrios ocasionaron que se retome la iniciativa de ley que pretende sancionar con cárcel hasta por dos años a quien condusca drogado o borracho.

Unas semanas atrás diputados del Congreso del estado aprobaron prisión por conducir en estado de ebriedad o bajo los influjos de las drogas en Quintana Roo pero la ley no ha sido publicada debido a las presiones que han ejercido empresarios hoteleros y turísticos del estado.

El primer accidente ocurrió en la ciudad de Chetumal cuando un sujeto en estado de ebriedad, transitaba a exceso de velocidad sobre la avenida Prolongación Álvaro Obregón en la entrada a la ciudad de Chetumal, cuando perdió el control de su automóvil  marca Chevrolet tipo Matiz,  se subió a la banqueta, chocó contra un poste.

Como saldo de este accidente cuatro personas requirieron de atención médica, tres de ellas mujeres que tuvieron que ser trasladadas un hospital debido a las heridas que presentaban.

El segundo accidente ocurrió en la ciudad de Felipe Carrillo Puerto en el que se reportó cuatro personas lesionadas, entre ellos un bebé; dos vehículos quemados en su totalidad y pérdidas económicas de al menos 400 mil pesos.

El accidente ocurrió en la calle 81 con 82, de la Colonia Jesús Martínez Ross cuando un sujeto en estado de ebriedad circulaba en una camioneta tipo Avalanche e impactó de frente a una motocicleta, en la cual viajaba una familia compuesta por tres personas.

Los ocupantes de la motocicleta cayeron al pavimento, en tanto que la motocicleta fue arrastrada varios metros por la camioneta lo cual generó un incendió, que se propagó rapidamente y ocasionó se quemaran ambos vehículos.

Entre los ocupantes de la motocicleta iba un bebé que sufrió golpes al caer por lo que paramédicos le trasladaron, juntos con sus papás, al Hospital General de Felipe Carrillo Puerto, para sean valorados.

También se llevó al nosocomio al supuesto responsable del accidente, quien quedó bajo custodia de la Policía Ministerial.