Alejandro Peza
El Instituto de Movilidad de Quintana Roo (Imoveqroo) alargó hasta el segundo semestre del 2023 el proceso de autorización de incremento de tarifas de 19 sindicatos taxistas del estado de Quintana Roo.
El director general del Imoveqroo, Rodrigo Alcázar Urrutia, precisó que será hasta el mes de noviembre cuando se determine cuantas solicitudes procedieron.
«La ley establece las fechas en las que debemos dar respuesta, pero no necesariamente significa que aprobaremos el aumento en las tarifas», precisó.
Dijo que los sindicatos taxistas tienen que fundamentar sus solicitudes de incremento de tarifas con un estudio socio económico y no solo con referencias del índice de inflación.
Declaró que si bien están consientes de que hay aumentos en las gasolinas y refacciones, lo que buscan es que haya un equilibrio con la tarifa para que no genere afectaciones económicas a los ciudadanos.
En ese sentido insistió en que aún y cuando algunos sindicatos den por un hecho de que «en breve les autorizarían el incremento en las tarifas» esto no será así.
Rodrigo Alcázar, manifestó que no hay ninguna razón para que los operadores cobren de más o «por voluntad propia hagan ajustes».
Destacó que los inspectores del Instituto de Movilidad de manera frecuente realizan operativos para garantizar que se respete la tarifa actual, además de la advertencia de aplicar multas a los operadores que modifiquen a su criterio las tarifas.
En el caso del municipio de Othón P. Blanco, el Sindicato Único de Chóferes de Automóviles de Alquiler (Suchaa) mantiene firme su solicitud de incremento de tarifas, el secretario general, Julio Cesar Castilla, indicó que fue en el año 2019 cuando se autorizó la última modificación a las tarifas.
«Seguimos insistiendo en que se ajuste la tarifa que no se ha modificado desde el año 2019 y pese a que hay un incremento de los costos del combustible y los insumos para los taxis».
El Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler ha solicitado un incremento de tarifas del 30 por ciento pues los cobros actuales se mantienen vigentes desde el año 2019.
De autorizarse la modificación, el costo del pasaje pasaría de 20 a 26 pesos en tarifa baja, y de 35 a 45 pesos en la más alta.
Julio Cesar Castilla Zapata, aseguró que la petición al Instituto de Movilidad se sustenta en el alza mensual de los combustibles, que en el último año, acumuló un 35 por ciento en costos.