Cerca de 400 maestros de Educación Indígena en Quintana Roo se manifestaron en Palacio de Gobierno en la ciudad de Chetumal

Alejandro Peza

Unos 400 maestros de Educación Indígena en Quintana Roo se manifestaron en Palacio de Gobierno en la ciudad de Chetumal para solicitar la intervención del Gobierno del Estado y evitar su traslado laboral de la Dirección General de Educación Indígena (DGEI) al Instituto Nacional de Pueblos indígenas (INPI).

Los profesores están adscritos a escuelas de educación Indígena de los municipios rurales del estado y temen ser enviados al Instituto Nacional de Pueblos indígenas.

Los profesores, iniciaron un plantón permanente y este viernes buscarán una audiencia con el presidente Andrés Manuel López Obrador para exponerle este tema que les afectará, previo o después del evento “Mujeres por el Acceso a la Tierra”, a realizarse a las 14:00 horas en la Explanada de la Bandera de Palacio de Gobierno.

En el 2019, la Fracción Parlamentaria de Morena, con el argumento de fortalecer el proceso de enseñanza bilingüe y optimizar recursos, promovió una iniciativa encaminada a desaparecer la Dirección General de Educación Indígena (DGEI) e incorporarle al Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI).

Es asi que el pasado 10 de abril se publicó en la Gaceta del Congreso de la Unión la autorización para desaparecer la Dirección General de Educación Indígena.

Desde entonces ha habido protestas a nivel nacional, con el fin de revertir esa determinación, que de acuerdo a los docentes llevará a un retroceso a este sector.

En Quintana Roo la primera manifestación fue el 9 de mayo en Felipe Carrillo Puerto y una semana después en Chetumal para reiterar su desacuerdo.

Este jueves ocurrió otra protesta realizada por casi 400 profesores de Educación Indígena, que reiteraron sus demandas.

Un dato importante es que en Quintana Roo son aproximadamente 950 maestros de la DGEI que brindan atención a casi 27 mil alumnos de los municipios de Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos, Lázaro Cárdenas, Tulum y Bacalar.

Los docentes explicaron que de aplicar la incorporación al INPI, se tendrá un retroceso laboral pues actualmente cada maestro basificado percibe aproximadamente cinco mil 500 pesos, pero al cambiar de adscripción su sueldo disminuirá y con ello, las oportunidades de trascendencia y mejora de condiciones laborales.