La Agencia de Seguridad Alimentaria de Quintana Roo informó que elabora un programa que permitirá atender a unas 500 mil personas en el estado

Alejandro Peza

La Agencia de Seguridad Alimentaria de Quintana Roo (Asaqroo) informó que elabora un programa que permitirá atender a unas 500 mil personas en el estado que están en situación de insuficiencia alimenticia.

El director general de la Asaqroo, Ignacio Perera, explicó que para lograr este objetivo se trabaja en coordinación con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Agencia Mexicana para la Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid), para trabajar en el programa «Mesoamericana Sin Hambre» que pone a su servicio soluciones innovadoras de desarrollo para garantizar una vida digna para toda la población, especialmente la más vulnerable.

El funcionario mencionó que de acuerdo al Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en Quintana Roo hay 500 mil personas en pobreza, de las cuales 200 mil están en situaciones extrema, que implica la incapacidad para acceder al sustento alimentarios.

“Los indicadores de la última medición que fue en 2020, sabemos que posterior a esa medición, hubo un suceso que género que la situación se agravara, que es el tema de la pandemia, que provocó un retroceso, y que seguimos afrontando pese a loa esfuerzos que se han hecho”, comentó.

Dijo que el acompañamiento de las organizaciones internacionales ayudarán a «tropicalizar» estrategias que han funcionado en otros países o en su caso generar nuevas estrategias con base en la experiencia local.

«Para esto necesario es un esfuerzo transversal de las dependencias gubernamentales de Quintana Roo para cubrir las necesidades que existen, con el apoyo de todos los programas que ya existen».

Ignacio Perera, comentó que con la Agencia de Seguridad Alimentaria de Quintana Roo se irán aplicando las estrategias de manera gradual debido a que cada región del estado tiene sus particularidades, pero además se debe generar conciencia entre la población, iniciativa privada y gobierno para atender un tema que repercutirá en la siguiente generación de población.

Un dato relevante es que durante la administración del ex gobernador Carlos Joaquín González se dispararon los índices de pobreza en Quintana Roo pues el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) reveló que el estado de Quintana Roo concentró el mayor número de personas en situación de pobreza en México, entre 2018 y 2020 a pesar de generar el mayor porcentaje de divisas por turismo en el Caribe Mexicano y Riviera Maya.

De acuerdo a los datos aportados por el Coneval la pobreza extrema también incrementó, y 48 por ciento de los habitantes de Quintana Roo viven en estado de vulnerabilidad, lo que posicionó a la entidad en el lugar 13 a nivel nacional.

El reporte de la Medición Multidimensional de la Pobreza en México 2018-2020, consideró los indicativos en rezago educativo; acceso a la seguridad social; acceso a la alimentación nutritiva y de calidad; grado de accesibilidad a carretera pavimentada, y actualización de las líneas de pobreza por ingresos.

Y señala que en el periodo de 2018 a 2020, la entidad incrementó 17.3 por ciento el número de personas en penuria, pues en 2018 contó con 546.4 mil pobres (30.2%), número que subió considerablemente a 892.9 mil (47.5) en 2020.

Las entidades que siguieron el comportamiento económico y social fueron Baja California Sur con 9 por ciento, Tlaxcala, 8.3 por ciento, Estado de México 7.1 por ciento, y Yucatán con 5.5 por ciento.

La medición precisa, que Quintana Roo pasó de 69 mil ciudadanos (3.8%) en esa situación de pobreza extrema, a 199.4 mil (10.6).

El incremento de 6.8% en 2018 a 2020, también fue el más elevado de México.

Coneval detalló que 329.9 mil personas se encuentran en rezago educativo; 466.7 mil tiene carencia por acceso a los servicios de salud; 908.6 mil no cuenta con seguridad social, y 266.9 mil carecen de calidad y espacios de la vivienda.

Además de que 401.8 mil personas no tienen servicios básicos y 553 mil personas no pueden acceder a la alimentación nutritiva y de calidad.