Alejandro Peza
El Consejo de Representantes del Colegio de Académicos de la Universidad Autónoma del
Estado de Quintana Roo (UQRoo) se mostró en contra de que desaparezcan cuatro carreras del programa de estudios
En un comunicado, destacó que las licenciaturas de Antropología Social, Gobierno y Gestión Pública, Seguridad Pública y Relaciones Internacionales, cumplen con una función primordial para el Estado.
Destacaron que en el caso de Antropología Social cumple con su objetivo ya que
Quintana Roo es una entidad diversa, es habitado históricamente por mayas y otros pueblos originarios
Además señalan que de acuerdo con el Plan de Desarrollo del Presidente Andrés Manuel
López Obrador, son quienes deben recibir atención prioritaria para mejorar sus condiciones
de vida y en esto juega un papel muy importante los Antropólogos Sociales
De igual manera indicaron que en el Decreto de creación de la Universidad de Quintana Roo se establece, entre otros aspectos que debe ser una institución de educación superior e investigación científica que fomente la participación corresponsable de la sociedad.
Consideraron que las cuatro carreras son fundamentales, además de que la creación, modificación y supresión de programas educativos, requiere de la autorización del Consejo Universitario y la opinión
favorable de la Comisión Estatal para la Planeación de la Educación Superior.
Los académicos, solicitaron la apertura del dialogo con rectoría, pues establecieron que la Uqroo demanda del trabajo colaborativo en el que participen y sean tomados en cuenta
todos los miembros de la Comunidad Universitaria.
El Colegio de Académicos de la Universidad de Quintana Roo señaló que, en los últimos años, las autoridades de la UQRoo no han organizado actividades sistemáticas para promover la oferta educativa de la institución,
omisión que ha afectado de forma negativa en la demanda escolar de diversas carreras.
Lo peor es que con este tipo de anuncios la propia autoridad
universitaria, desalienta el interés de potenciales estudiantes.
Un dato importante es que, en el presente rectorado, la Universidad ha decrecido en cuanto al porcentaje de programas acreditados por los organismos evaluadores.
De acuerdo con el Informe de Actividades 2022, en 2019 el porcentaje de programas educativos con
reconocimiento de calidad ascendía a 95.7%, bajando de forma sustantiva en 2022, que
contabilizó únicamente 70%. Esto impactó en la matrícula de estudiantes inscritos en programas de calidad, pasando de 84.1% a 65.4% en el mismo periodo.
Otro dato relevante es que, el Colegio de Académicos, a través de su Mesa Directiva,
solicitó una reunión de trabajo con el rector, Francisco López Mena, para atender
puntos sustantivos del Reglamento del Personal Académico (RPA) que las autoridades
buscan instrumentar y, recuperar el trabajo colegiado con los docentes que se ha visto interrumpido desde enero del presente año.
Explicaron que hasta la fecha, no se ha dado el encuentro, cuando la petición fue realizada mediante oficio desde el 10 de febrero pasado.
Por si fuera poco, los académicos señalan que, a nivel general, el ambiente de trabajo en la Universidad se
ha visto enrarecido por la falta de diálogo entre rectoría y la Comunidad Universitaria.