Alejandro Peza
De nuevo la presidenta del Instituto Electoral de Quintana Roo, Rubí Pacheco Pérez se enfrentó con la mayoría de los representantes de partidos políticos quienes la señalan de acoso laboral, despidos injustificados y de malgastar el presupuesto oficial.
En la sesión de este lunes, los representantes del PRI, PT y Movimiento Ciudadano aseguraron que Rubí Pacheco mantiene actitudes soberbias y un distanciamiento «oficial», además de negarse a escuchar y la tomar decisiones unilaterales.
Rubi Pacheco ordenó cambiar todo el mobiliario de la sala de sesiones, así como también autorizó la compra de equipo de cómputo y la instalación de un portón eléctrico para el estacionamiento de la presidenta y del resto de los consejeros electorales.
También se habla del proceso de renuncias y despidos de los trabajadores, aunque hasta ahora no se tiene la relación del total de los empleados que dejaran el Ieqroo y cual sera el gasto por el pago de los finiquitos.
El representante del PT Octavio González manifestó que «la memoria del buen trabajo del pasado no se borra únicamente cambiando muebles y realizando gastos innecesarios y «superfluos».
«No han transcurridos dos meses y el Ieqroo sigue en el ojo del huracán».
Uno de los pocos apoyos que recibió la presidenta consejera fue de la representante del Partido Verde Ecologista de México, quien ratificó su respaldo a la Consejera presidenta del Ieqroo por los gastos realizados para la remodelación de la sala de sesiones y calificó de irrelevantes los señalamientos de sus colegas.