Alejandro Peza
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio en (Canaco) Chetumal, Juan Jaime Minguer Cerón, señaló que el decreto presidencial de Zona Libre para Chetumal no ha tenido los efectos esperados.
Recordó que, tras la revisión del contenido del decreto que entró en vigor a partir del 1 de enero del 2021, el Consejo Coordinador Empresarial hizo una serie de propuestas – entre ellas la posibilidad que sean utilizados los puertos mexicanos y no sólo el de Belice para la importación de mercancías hacia Chetumal; que la aplicación del IVA a dichas mercancías sea del 8 por ciento aplicado a la capital del Estado así como la relación de productos contenidos en dicho decreto para que sean rentable ya que hasta el momento muchos artículos provienen de países donde no hay tratado comercial – pero que hasta el momento no han tenido respuesta.
Señaló que han tenido acercamientos con los diputados federales así como funcionarios de dependencias federales para lograr las modificaciones al decreto presidencial y se tengan los resultados esperados y ese decreto sea funcional.
Mingüer Cerón manifestó su confianza en que antes que termine el presidente Andrés Manuel López Obrador su gestión tengan resultados positivos, ya que hasta el momento ningún empresario local ha podido incorporarse a ese esquema presidencial.
Desde inicios de año, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Chetumal preparó una propuesta de modificación del decreto de Zona Libre de Chetumal debido a los escasos beneficios económicos y fiscales, el dirigente del CCE, Eloy Quintal Jiménez, precisó el error es que nunca se analizaron las «letras chiquitas» del decreto.
«Del sureste mexicano, la ciudad de Chetumal es de las zonas menos beneficiadas en el sector turístico y de las que más expectativas se generaron con la declaratoria de zona libre y estímulos fiscales para la frontera sur anunciada en octubre pasado por el presidente Andrés Manuel López Obrador».
Eloy Quintal Jiménez, precisó que a 22 meses de publicarse el decreto la población de Chetumal paso de la celebración al desánimo porque no han sentido reflejado en sus bolsillos los supuestos beneficios que traería la reducción del IVA del 16 al ocho por ciento, la disminución del Impuesto Sobre la Renta y la disminución en el precio de la gasolina.
Hace más de dos años, exactamente el 26 de octubre de 2020, el presidente dijo que analizaba que el programa de Zona Libre y estímulos fiscales aplicados en la frontera norte, tenía una alta probabilidad de aplicarse en Chiapas y Chetumal, Quintana Roo.
Un mes después, el 27 de noviembre, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, expuso que consumaron el análisis y habría cuatro instrumentos jurídicos en decretos publicado el 28 y 31 de diciembre, para que entren en vigor el 1 de enero de 2021:
1 Ampliación de la vigencia del decreto de estímulos en la frontera norte; 2 Decreto de estímulos fiscales en la frontera sur; 3 Decreto de estímulos del IEPS de la gasolina en la frontera sur; y 4 Decreto que establece los beneficios arancelarios en la zona libre de Chetumal.
El tercer decreto generó confusiones y altas expectativas para los habitantes de Chetumal, porque aplaudieron que bajaría el precio de la gasolina; sin embargo el Gobierno Federal los dejó fuera de esta medida.
El decreto de estímulos del IEPS de la gasolina en la frontera sur, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 28 de diciembre, establece que se incluirían a la franja fronteriza sur del país colindante con Guatemala, pero no incluye a la capital de Quintana Roo.
El decreto establece que, aplicaría la exención del impuesto general de las importaciones y la exención del derecho del trámite aduanero.
Así como las otras dos reducciones: la del IVA del 16 al ocho por ciento, y la reducción del Impuesto Sobre la Renta del 30 al 20 por ciento.
Con vigencia al 31 de diciembre de 2024, el decreto indica “que para impulsar la Región Fronteriza de Chetumal se considera pertinente desgravar arancelariamente las mercancías extranjeras de alimentos y abarrotes; tiendas de autoservicio; comercialización de ropa, bisutería y accesorios de vestir; comercialización de productos farmacéuticos, lentes y artículos ortopédicos.
También las de comercialización de maquinaria y equipo; comercialización de materiales para la construcción; restaurantes y otros establecimientos de preparación de alimentos y bebidas; hotelería, moteles y otros servicios de alojamiento temporal.
Incluyen los servicios educativos; médicos y hospitalarios; de esparcimiento culturales y deportivos, así como recreativos; de reparación y mantenimiento de automóviles; alquiler de bienes inmuebles, maquinaria y equipo, pero no de venta de gasolina.
Lo cierto es que la gente de Chetumal ha perdido la esperanza de que la situación económica mejore, pues cada vez es menos la esperanza de que su comunidad vuelva a ser lo vigorosamente económica que lo fue hace 30 años cuando Chetumal fue zona libre.