Alejandro Peza
Productores cañeros del sur de Quintana Roo reportan perdidas en sus cultivos por más de 30 millones de pesos.
La industria cañera del sur de Quintana Roo registró pérdidas en sus cultivos por unos 30 millones de pesos debido a la afectación que dejaron las fuertes tormentas que se registraron durante el mes de agosto, dijo Benjamín Gutiérrez Reyes dirigente estatal de la Confederación Nacional de Productores Rurales.
«Las fuertes lluvias inundaron los campos de caña, por lo que las actividades de cosecha se detuvieron temporalmente, dejando al menos 27 mil toneladas de la vara en campo, entre cortadas y quemadas, lo que representa una pérdida de casi 30 millones de pesos para los productores».
Comentó que las lluvias tienen también una afectación en el rendimiento de la caña pues hay una disminución en el indice de producción de azúcar.
“Por las lluvias, la quema, el corte y levante de caña de azúcar se suspendió, al igual que la molienda en la fábrica del Ingenio San Rafael de Pucté, a falta de materia prima. Pues cortar y meter caña en estos momentos, representa una disminución en el Karbe, y los industriales se niegan a mantenerlo”, explicó.
El Karbe se refiere a los Kilogramos de Azúcar Recuperables Base Estándar que pueden obtenerse por cada tonelada de caña de azúcar cosechada.
El líder cañero, explicó que pese a la pérdida hay un seguro que protege las pérdidas económicas por la caña de azúcar que se queda en campo, y cuyos montos de pérdida se dividen en 3 partes; los productores, el Comité de Producción y Calidad Cañera y el ingenio San Rafael de Pucté.
«Sobre las pérdidas, estamos protegidos por la ley de Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar, la cual establece que por causas naturales, como lluvias, las pérdidas se dividirán en 3 partes; los productores, el Comité de Producción y Calidad Cañera y la industria, pagándose estimaciones de la producción al productor”.