Alejandro Peza
La Secretaría del Medio Ambiente (SEMA) en Quintana Roo busca «blindar» la ley estatal en materia de eliminación de plásticos de un solo uso después de que una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación establece que los gobiernos estatales carecen de competencia para prohibir o regular la venta de PET y Unicel,
Y es que a Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) estableció que los gobiernos estatales carecen de competencia para prohibir o regular la venta de plásticos de un solo uso.
El 17 de agosto pasado, la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró inconstitucionales las reformas realizadas por la 64 Legislatura del Congreso de Oaxaca a la Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Sólidos.
Con estas reformas, los legisladores locales prohibieron la venta, distribución o uso de botellas desechables de tereftalato de polietileno (PET), así como envases y embalajes desechables de poliestireno expandido (unicel).
Efraín Villanueva Arcos, titular de la SEMA en el estado, explicó que raíz de esta sentencia de la SCJN se busca algún mecanismo legal para evitar que se siga comercializando los plásticos de un solo uso.
«Estamos analizando los alcances de la sentencia que por ahora solo aplica para el estado de Oaxaca pero que pudiera tener alguna repercusión en la Ley de Quintana Roo contra la comercialización y venta de plásticos de un solo uso».
En Quintana Roo los plásticos de un solo uso están prohibidos desde el año 2019 en la que se publicó la Ley, aunque su aplicación se dio hasta el año 2022 por la pandemia de COVID-19 y finalizó en enero del año 2022, cuando se publicaron los dos reglamentos para su ejecución.